Call me maybe

Yo ya no sé lo que le pasa a ese chico en la cabeza. Le pido que por favor no se vaya, que no me abandone, al menos hasta que salga el sol, pero se va y me deja ahí, preguntándome por qué siento que no puedo vivir sin él. Se ha convertido en mi speed diario, aunque me hiera el orgullo decirlo, es mi más feroz adicción, y me muero si no le tengo, aumenta mi ansiedad y sueño despierta con sus labios calientes. Y es que no puedo deshacerme de él, no puedo borrarle de mi lado, sus huellas de mi piel, sus pasos por mi habitación, el olor del que llena mi almohada, sus besos de mi cuerpo, no puedo. Dudo que algún día pueda sentir esto hacia otra persona, ¿me oyes? Te quiero un mazo. Ya está dicho. Estoy perdida. Perdida en él. Mierda. Tengo que salir de aquí, aunque no quiera, aunque ni siquiera me parece posible imaginar mi vida sin él haciéndomelo pasar mejor y peor que nunca, pero lo necesito. No me costó nada dejarle entrar, pero voy a luchar a morir para echarle a patadas de aquí dentro si hace falta. Quiero algo de verdad, sin peros, alguien que esté a mi lado incondicionalmente. Y si hay algo claro, es que esto ha llegado demasiado lejos, que tú no eres mi mitad, y lo peor es que lo sabíamos desde el principio. A mí ya me ha llegado la hora de pasar página, lo siento por ti, por mí, y mucho más por aquel remoto ''nosotros''.

Comentarios

Entradas populares